Nueva Ruta

Menos de un año de mi última entrada en este blog. En este tiempo varias cosas cambiaron. Varias importantes!!! En realidad y pensándolo bien, todos los cambios son importantes y trascendentes, pueden ser buenos o malos, pero no dejan de influir en nuestras vidas. Proyectos laborales y personales, todos cambios hasta el momento positivos y de gran satisfacción. Me embarqué en cosas que jamás imaginé, me esforcé y llegué a cumplir un sueño impensado.
Pero creo que uno de los cambios más fuertes y menos esperados (si no es EL cambio), es que esta SOYSOLA ya no lo es tanto. Cómo, cuándo o por qué son preguntas que resultan complicadas de responder, porque fue casi sin avisar y de repente. Encontrarte de golpe así, como quien no quiere la cosa, junto a una persona con la que volviste a tener ganas de compartir y proyectar. A los ponchazos ponele, casi casi con la velocidad de la luz. Y ahí te ponen un freno de mano violento, das un cabezazo, te acomodas otra vez y vuelven a emprender el viaje, mas despacio, total nadie nos corre y tenemos tiempo. Como dos compañeros de viaje, piloto y copiloto, alternando en la ruta, parando cuando es necesario, pero sin dejar de tener en claro para donde va el camino, tratando de no desviarse, para que nadie salga lastimado, sobre todo nuestros tesoros.
Y sí, cuando crees que el viaje se hace en soledad te das cuenta que es solo un tramo, porque como dije más de una vez, las cosas se disfrutan más en compañía, pero hay que encontrar el compañero, el que busque mas o menos la misma ruta.
En eso estoy, en esta nueva ruta... en compañía...

Movimientos, cambios, miedos, inseguridades... Sensaciones y pensamientos, todo mezclado, sin saber bien para donde disparar. 

Y si algo que está bien, un paso necesario cambia todo para siempre?? Y si el remedio es peor que la enfermedad?? No lo sé, y no voy a saberlo si no avanzo. Y cada paso que doy lo doy con miedo, insegura de si voy a pisar firme. Con un miedo que me paraliza, por dentro. Todos creen en mi valentía y fortaleza, en mi seguridad para dar cada paso. Pero mi interior tiembla, mi cuerpo duele y mi corazón no aguanta, se me cierra el pecho y me cuesta respirar. Todo eso por cada paso. Pero no hay opción, hay que avanzar. O quedarse y esperar que algo pase... 

No, prefiero respirar hondo y avanzar, con miedo e inseguridad, pero dar un paso atrás de otro, caer y levantarme, una y mil veces.

Es momento de pensar alternativas, de buscar nuevos caminos, o de empezar a recorrer el propio, hacerlo a cada paso, con miedos e inseguridades, pero sin quedarse a esperar. 

La maldición del primer beso.

El primer beso es inolvidable, único e irrepetible. Recordás día, nombre, momento y lugar. En ese primer beso empieza una nueva etapa, la vida amorosa. Mi primer beso fue..., con...., en.... Eureka!!!! No recuerdo que mi primer beso haya cambiado mi vida, ni haya sido trascendente, no recuerdo como se llamaba el besador, ni como fue, ni recuerdo haber sentido nada extraño. Nada!!! Y ahí tiene que estar el inicio de mi tremenda vida amorosa. Si mi primer beso fue un fracaso, si desde el inicio las cosas no salieron bien, es lógico que nada después de eso fuera bueno.
Bueno, no puedo reparar que mi primer beso haya sido claramente olvidable, vaya uno a saber por qué. Pero debería ver como hacer para modificar lo que ese beso destinó para mí. No puedo tener otro primer beso, eso descartado...
Lo que sí puedo hacer es esperar a que llegue el momento de EL beso. Ese que te deja sin aire, que te hace volar y detiene el tiempo, ese que rompa el hechizo del "primer beso más malo de la historia"!!!!!!

3 en uno. Cortitos y sin pensar...

Son tres párrafos,que podrían no tener demasiado sentido juntos, pero que salieron, uno atrás de otro casi sin pensarlos...

1.
Hace un tiempo empecé una búsqueda, que realmente no sabía hasta dónde iba a llevarme. Un camino que podía terminar en cualquier parte, pero que definitivamente tenía que ser mejor. Y cuando uno empieza una travesía, lleva un mapa, algunos puntos claves para detenerse, pero no sabe que hay entre esos puntos, ni con que puede cruzarse, e incluso a veces tiene que desviarse porque la ruta estaba mal marcada. Pero lo mejor es el viaje, y poder disfrutar del camino que nos lleva a destino.

2.
Hoy como mujer adulta, finalmente pude escuchar a esa nena que había quedado indefensa y sin ser oída. Esa niña que necesitaba decir un montón de cosas para poder crecer y convertirse en una mujer. Hoy  sé que quiere y que necesita. Necesita ser aceptada, necesita cuidados, necesita no sentir miedo ni vergüenza. Una niña que necesita de esta mujer.

3.
Estoy llegando a un punto en el que finalmente siento un equilibrio, uno positivo claramente.
Puedo darme cuenta que quiero y que no.
Puedo entender mis sentimientos, y aislarlos de mis pensamientos.
Puedo reirme con ganas, sin forzarlo.
Puedo llorar con las mismas ganas.
Puedo querer, amar, sufrir, odiar...
Puedo. Simplemente puedo.

Hacerse cargo???

"Dejá de hacerte la boluda". Sí, así, sin vueltas. Así me explicó que tengo que empezar a hacerme cargo. Tengo que reconocer que me sorprendió, no esperaba que me lo dijera así, tan de golpe y como un piedrazo. Pero es cierto, me estoy haciendo la boluda. Por qué? Porque la paso bien, porque me divierto, porque me atrae, y porque así no tengo que pensar en posibles consecuencias. Y vamos, todos nos hicimos los boludos en algun momento de la vida. Es cierto que algunos permanecen ahí más tiempo del indicado, incluso pueden llegar a pasar toda su vida así. Pero hacerse el boludo un tiempo ayuda, a pasar situaciones, a soportar gente, o simplemente a no hacerse cargo...
El tema es cuando tenés que hacerte cargo. Tengo que hacerme cargo, pero no sé si ahora, eso es más complicado. Estaría bueno decir "ma siiiiiii, yo me mando", pero no, no puedo, no me animo... Así que, damas y caballeros, creo que por el momento me hago la boluda, o mejor dicho, no hacemos los boludos. En algún momento alguno quizás de el primer paso...

De piratas y tesoros

Vuelvo después de mucho tiempo a este espacio, que tenía un poco olvidado, releo las últimas entradas y me doy cuenta que sólo algunas pocas han cosas cambiado. No sé si eso sea bueno o malo, ya veremos. Por lo pronto es lo que hay.
En fin, lo que hoy quiero compartir, y es algo que me dejó dando vueltas en la cabeza, fué algo que me dijo un gran amigo (algo que le había dicho una amiga suya), en una charla de esas que solemos tener. Hablábamos de la vida, de las relaciones y las no relaciones, y ahí salió LA frase: "el buen pirata sabe cuando bajarse del barco por un buen tesoro", a lo que yo le agregaría sacarse el parche. Ahora, mi pregunta es ¿realmente lo saben? Quiero decir, un pirata de ley, ¿se dá cuenta siempre del tesoro que tiene frente a sus ojos?¿Y si no lo ve y lo deja pasar?, y lo peor de todo, ¿y si el tesoro somos nosotras? Sí, tengo el autoestima bastante más arriba que las últimas veces, y me considero, no te voy a decir un graaaaan tesoro, pero tengo lo mío!!!! Bueno, quizás exagero un poco, a lo mejor se me fué la mano...jajaja
A lo que voy es que, y en esta debo sincerarme y creo que las mujeres me acompañarán, en gral nos sentimos más atraídas a los piratas que a los capitanes buenos. Entonces, veo al pirata, el pirata no ve el tesoro, sigue con su parche y arriba de su barco, el barco se va con el pirata, el tesoro se queda en la playa...Pirata sin tesoro, tesoro sin pirata... Nono, tiene que ser como dice la amiga de mi amigo, sino para que están los piratas si no es para encontrar tesoros????
Espero haber sido clara, y que cada pirata encuentre su tesoro, y que cada tesoro sea descubierto por el pirata correcto!!!!!!

Sí, Soy sola

Ya el sólo hecho de viajar a Mar del Plata para tener que trabajar sábado y domingo no es lo ideal para pasar un fin de semana. Pero si a eso le sumamos un viaje en la más absoluta soledad lo convertimos en casi casi deprimente. Sí, el mar relaja, me encanta quedarme tirada cual morsa después de una jornada laboral mirando el mar horas, tomando mate y disfrutando de la playa, caminar y pensar en nada. Pero debo ser sincera, no puedo seguir engañandome y hacerme la superada, todo eso es mucho más disfrutable en compañía. Y aunque adoro a mis amigas/os, hablo de otro tipo de compañía. Y sí, saquemonos las caretas de una vez! Quiero estar tirada en la playa horas, disfrutar hasta que se haga de noche, caminar por la costa, y hacerlo al lado de un hombre. Pero no, no es lo que sucede, nada más alejado de mi realidad actual. Y no sólo no se acerca a la realidad, sino que el universo conspira y me lo recuerda a cada rato. Luego de casi dos horas de caminata pensando en nada, me siento en un bar, frente al mar, al atardecer (sí, soy masoquista, y que?), para tomar algo en la más absoluta tranquilidad. Pero todo se va al cuerno cuando entra en escena la camarera y dice, ME dice: "sos sola?" Perdón? Se me nota en la cara???? Qué necesidad hay de destruir el autoestima de una persona? Por qué no podía simplente decir "Qué vas a tomar?" Y aunque tenía ganas de contestarle "No, mi marido fué a estacionar el auto... a la recalcada concha de tu hermana!!!" Mantuve mi eje, le contesté con un Sí y una sonrisa leve (muy leve), y pedí un capuccino y dos medialunas, para sentirme acompañada, y como no podía ser de otra manera, vuelve la imbecil (bue, la camarera) diciendome que solo le queda UNA medialuna. Hay necesidad?? Y buenooooo, traeme unaaa medialuna!! Yo soy sola, y la medialuna también...